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El tenista argentino venció por 7-6 (5), 3-0 y retiro de Novak Djokovic, que no pudo continuar por un dolor intenso de la espalda que lo obligó a decir "no va más"; por cuarta vez en su historia el equipo argentino llega a una serie decisiva, otra vez el rival será España
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BELGRADO.- Es tiempo de ajustar coordenadas y de ir en busca del asalto final. De recordar que, hasta hace unos días, la Argentina miraba el desafío de Serbia como una cuesta bastante empinada. El objetivo primario era llegar con posibilidades al último día de competencia. Luego, mientras los días pasaban y Novak Djokovic tardaba en llegar a esta ciudad, comenzó a evaluarse la posibilidad de tomar ventaja de su ausencia casi segura en el primer día de acción. Eso fue lo que se consiguió, además de otro impacto certero con la victoria de Juan Martín del Potro sobre Janko Tipsarevic.
A nadie debe extrañar que, para la Argentina, era un negocio altamente favorable llegar con ventaja de 2-1 al domingo, como visitante y ante el actual poseedor de la Copa Davis. Es cierto que la primera posibilidad de asegurar el triunfo se escapó ayer, con la derrota en el dobles de Juan Ignacio Chela y Juan Mónaco por 7-6 (7-4), 6-4 y 6-2 frente a Nenad Zimonjic y Viktor Troicki. Pero el equipo dirigido por Tito Vázquez está aún al frente en el resultado, y hoy, a partir de las 9 de nuestro país (las 14 en esta ciudad), con la disputa de los últimos dos singles en el Belgrado Arena, buscará cerrar la serie y llegar por cuarta vez en su historia a la final de la Ensaladera; en principio, con un toque extra de pimienta para la jornada de cierre, como sólo puede serlo la irrupción en la serie del N° 1, con lo cual el programa se ajustaría al orden original de la pizarra: Djokovic-Del Potro, seguido de Tipsarevic-Nalbandian.
Luego de conquistar el US Open, Nole desembarcó recién el jueves por la tarde aquí; no bastó su sola presencia para dar un golpe de efecto ante un equipo argentino que ya estaba convencido de que no iba a jugar al día siguiente. Ayer fue por más: apenas minutos después de la victoria en el dobles, Djokovic salió de su puesto detrás del banco, se quitó la chaqueta y comenzó a entrenarse en el court del Belgrado Arena, delante de cientos de simpatizantes. Peloteó durante un rato con Janko Tipsarevic -que a su vez mostró un fuerte vendaje en el tobillo izquierdo- y luego de media hora, se cruzó en la salida con Juan Martín del Potro, que ingresaba para practicar con Nalbandian; se abrazó con el tandilense, con el que tiene una excelente relación, y partió. David, a su vez, se quedó charlando un rato con Tipsarevic.
La presencia de Nole es una incógnita debido a un dolor en el hombro derecho. El astro no dio mayores precisiones, pero no tuvo problemas en firmar autógrafos para decenas de chicos, e incluso convocó al fotógrafo de La Nación para posar con ellos. "Quiero que salgan todos", pidió el hombre que es héroe deportivo de Serbia. Todos quieren que juegue, pero también todos son conscientes de que no llega al ciento por ciento a una jornada decisiva. ¿Puede jugar Djokovic el quinto punto? Sí. El hecho de haber sido reemplazado pese a estar nominado como primer single serbio lo habilita reglamentariamente para jugar cualquiera de los dos últimos puntos, ya que no repetiría rival; eso formó parte de la estrategia planeada por el capitán Bogdan Obradovic, a sabiendas de que, por el trajín que arrastraba su máxima figura, no podría tenerlo los primeros dos días de juego, aun cuando sí se esperaba que Tipsarevic ganara su punto del viernes.
A la hora de las especulaciones, del lado serbio está la obligación de ir en busca del empate, y para jugar contra Del Potro, no hay muchas variables: poner a jugar a Troicki por tercer día seguido, o meter en la cancha a Djokovic. En el primer caso, el tandilense parte con un ligero favoritismo, que se acentúa si rinde como lo hizo anteayer contra Tipsarevic; estará, además, más descansado que su rival, que jugó dobles. Es más lógico pensar que Nole sea el rival de Delpo, porque viene con confianza y ritmo de juego -por eso no necesitaría entrenarse demasiado- y podría hacer valer el plus psicológico que significa enfrentar al N° 1 del mundo en su propia casa. Y más allá de que muchas veces las estadísticas de cruces previos no cuentan, Nole tiene un récord muy favorable (4-0) contra la Torre de Tandil. Salvo que las molestias físicas que arrastra sean más complicadas de lo que se sabe, Djokovic sería número puesto. Y en caso de que la serie quede igualada, el cruce decisivo quedaría a cargo de Nalbandian y Tipsarevic.
Los dos tienen experiencia en esta clase de compromisos; el cordobés podría desequilibrar a partir de su mayor solidez mental, sobre todo en un cruce de tensión máxima, mientras que del lado del serbio juega a favor la posibilidad de plantear un duelo de mayor desgaste e intensidad física, aunque habrá que ver cómo está su tobillo izquierdo, por un lado, y saber si mejora la imagen que dejó ante Delpo, que lo desbordó con potencia y consistencia.
La cita del último día ofrece otros matices. La Argentina cuenta todavía con ventaja, pero no podrá descuidarse ante un equipo serbio que ya dio muestras de saber reaccionar en situaciones muy adversas: el año pasado, derrotó a la República Checa en la semifinal, y a Francia en la final, en ambos casos por 3-2 y ganando los dos singles del tercer día de juego. Al mismo tiempo, debe convencerse de que la final está ahí, a sólo un paso, y que puede sellar un triunfo para el recuerdo.
EL 2-1, UN RESULTADO POSITIVO
Desde su regreso al Grupo Mundial, en 2002, la Argentina ganó las cinco veces que jugó como visitante y llegó 2-1 al último día de acción, ante Australia (4-1, en 2005), Croacia
(3-2, 2006), Austria (4-1, en 2007), Suecia y Rusia (3-2, ambos en 2010). De los casos citados, el conjunto nacional sólo accedió a la final en 2006, temporada en la que cayó frente a Rusia, en el Olympic Stadium de Moscú, por 3-2. Marat Safin selló el triunfo en cuatro sets ante Chucho Acasuso.
EL JOKER NO PERDIÓ CON DELPO
Novak Djokovic tiene hasta aquí un registro perfecto ante Del Potro, con cuatro victorias y ninguna derrota. Su último triunfo ante el tandilense fue este año por la tercera rueda de Roland Garros (6-3, 3-6, 6-3 y 6-3). Además, se impuso en los cuartos de final del Masters 1000 de Roma en 2009 (6-3 y 6-4), en el round robin del Masters de Shanghai de 2008 (7-5 y 6-3) y en la tercera rueda del US Open 2007 (6-1, 6-3 y 6-4).
