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La liga argentina tiene un carisma y un estirpe que hace que sea la mejor de latinoamérica. Lo confirma la FIFA y los títulos internacionales de los clubes argentinos.
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El campeonato argentino es el mejor de América. De eso no hay dudas. Y no porque lo diga yo, que mis raices son italianas y se puede pensar que tengo afincado a mis familiares por Buenos Aires... En realidada, la afirmación es tan clara y contundente como los argumentos que la fundan.
La calidad de los jugadores que participan, la diversidad de equipos con posibilidades de ganarlo, los títulos internacionales ganados por los clubes de aquel país, el suspenso al final de la competencia, la pasión de los aficionados, el interés del mundo entero, que hasta han viajado periodistas españoles a la Argentina para cubrirla.
Pero voy más allá. En el ranking de la Fifa, aunque no crea yo en las estadísticas, se marca como la mejor liga de latinoamérica. Y paso a explicar mis fundamentos: es la liga más competitiva de América, a vistas la cantidad de clubes que han podido salir campeones. Esto no es comparable con la liga brasileña, que es la única que juega torneos regionales, copas y al fin el nacional, conocido como el Brasileirao.
El certamen argentino tiene muchas aristas que no le permiten ser el mejor de todos. Una de ellas es la gente... así como se destaca el fervor de los aficionados, también ese fervor lleva a muertes y agresiones brutales que la hacen aberrante. El detalle, la contextura social del país, de la cual en otro momento hablaremos con más profundidad, porque ahora me basta con que se queden porqué no es la mejor liga del mundo.
Luego podríamos tomar la forma del certamen. Un torneo corto, que si bien da a la oportunidad a conjuntos pequeños de obtener un campeonato, también sentencia en desmotivación con respecto a los objetivos del descenso.
Luego podríamos anotar como astecto negativo, precisamente el descenso. ¿Por qué? Pues el certamen argentino defiende al que a pesar de tener una mala temporada, se puede salvar por haber hecho buenas campañas en las dos anteriores.
Esto ejemplifica la contradicción del sistema. Se corona campeón a un club por seis meses buenos, y desciende otro por haber tenido recien tres malos años. Es un sistema benévolo y poco realista. La verdad, es que lo que reactivó al fútbol argentino fueron los torneos cortos, porque esto renueva las ilusiones y potencia la competitividad. Hace que esta no sea una liga de dos.
Esta premisa, también genera malos estados. Por qué tras ellos se producen los desestabilizadores de la liga. Un entrenador tiene que rendir resultados a muy corto plazo, y si no lo hace, su salida es inmediata. Para muestra un botón, Rosario Central tuvo 4 entrenadores en los últimos seis meses, por poner un ejemplo aunque todos se asemejan. El Boca despidió a un entrenador campeón en un año por no tener resultados en el semestre próximo a la consagración, y así puedo seguir...
Paradójicamente, los factores que la hacen la mejor la hacen también una liga mediocre. Todo esto sin sumar las diferencias económicas. Cuando un jugador argentino se va a jugar a México, se suele decir que ‘por lo menos hará una diferencia en lo económico’. Nadie sueña con triunfar en lo deportivo, pues la saben una liga de poca resonancia. El futbolista se condena a no ganar una Copa Libertadores, por ejemplo. Qué decir entonces de aquellos que van a Chile, Ecuador, Colombia, Bolivia, Paraguay, Perú, y en menor medida Uruguay. Sus familiares deben ingeniárselas para saber de ellos.
La hace la mejor liga también el estirpe de los jugadores. Esa forma de salir al campo de juego 'con el cuchillo entre los dientes' y pensar y saber que no se le escapará ese título. Y llorar si pierde, como si se muriese en el campo de juego.
Prueba de esto es que casi siempre son los vencedores. Los equipos argentinos son los máximos ganadores de Copa Libertadores, con 22 títulos. Lo siguen los brasileños, con 13. Y en los últimos 10 años la han ganado 5 veces, repartiéndose la otra mitad un conjunto paraguayo, un ecuatoriano, un colombiano y dos brasileños. Además, cuatro de las siete Copas Sudamericanas las ganaron clubes argentinos.
Otro de los hechos, por el carisma y el ambiente, es el máximo derby del fútbol argentino: ha sido catalogado como el mejor de los diez espectáculos deportivos el Boca-River, qué más queda por decir? Sin dudas, la liga Argentina es la mejor de latinoamérica y de no ser por el escaso poder adquisitivo, sería la mejor del mundo, porque el mejor fútbol está en Sudamérica, por eso importan tanto de allí los equipos europeos.
FUENTE
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El campeonato argentino es el mejor de América. De eso no hay dudas. Y no porque lo diga yo, que mis raices son italianas y se puede pensar que tengo afincado a mis familiares por Buenos Aires... En realidada, la afirmación es tan clara y contundente como los argumentos que la fundan.
La calidad de los jugadores que participan, la diversidad de equipos con posibilidades de ganarlo, los títulos internacionales ganados por los clubes de aquel país, el suspenso al final de la competencia, la pasión de los aficionados, el interés del mundo entero, que hasta han viajado periodistas españoles a la Argentina para cubrirla.
Pero voy más allá. En el ranking de la Fifa, aunque no crea yo en las estadísticas, se marca como la mejor liga de latinoamérica. Y paso a explicar mis fundamentos: es la liga más competitiva de América, a vistas la cantidad de clubes que han podido salir campeones. Esto no es comparable con la liga brasileña, que es la única que juega torneos regionales, copas y al fin el nacional, conocido como el Brasileirao.
El certamen argentino tiene muchas aristas que no le permiten ser el mejor de todos. Una de ellas es la gente... así como se destaca el fervor de los aficionados, también ese fervor lleva a muertes y agresiones brutales que la hacen aberrante. El detalle, la contextura social del país, de la cual en otro momento hablaremos con más profundidad, porque ahora me basta con que se queden porqué no es la mejor liga del mundo.
Luego podríamos tomar la forma del certamen. Un torneo corto, que si bien da a la oportunidad a conjuntos pequeños de obtener un campeonato, también sentencia en desmotivación con respecto a los objetivos del descenso.
Luego podríamos anotar como astecto negativo, precisamente el descenso. ¿Por qué? Pues el certamen argentino defiende al que a pesar de tener una mala temporada, se puede salvar por haber hecho buenas campañas en las dos anteriores.
Esto ejemplifica la contradicción del sistema. Se corona campeón a un club por seis meses buenos, y desciende otro por haber tenido recien tres malos años. Es un sistema benévolo y poco realista. La verdad, es que lo que reactivó al fútbol argentino fueron los torneos cortos, porque esto renueva las ilusiones y potencia la competitividad. Hace que esta no sea una liga de dos.
Esta premisa, también genera malos estados. Por qué tras ellos se producen los desestabilizadores de la liga. Un entrenador tiene que rendir resultados a muy corto plazo, y si no lo hace, su salida es inmediata. Para muestra un botón, Rosario Central tuvo 4 entrenadores en los últimos seis meses, por poner un ejemplo aunque todos se asemejan. El Boca despidió a un entrenador campeón en un año por no tener resultados en el semestre próximo a la consagración, y así puedo seguir...
Paradójicamente, los factores que la hacen la mejor la hacen también una liga mediocre. Todo esto sin sumar las diferencias económicas. Cuando un jugador argentino se va a jugar a México, se suele decir que ‘por lo menos hará una diferencia en lo económico’. Nadie sueña con triunfar en lo deportivo, pues la saben una liga de poca resonancia. El futbolista se condena a no ganar una Copa Libertadores, por ejemplo. Qué decir entonces de aquellos que van a Chile, Ecuador, Colombia, Bolivia, Paraguay, Perú, y en menor medida Uruguay. Sus familiares deben ingeniárselas para saber de ellos.
La hace la mejor liga también el estirpe de los jugadores. Esa forma de salir al campo de juego 'con el cuchillo entre los dientes' y pensar y saber que no se le escapará ese título. Y llorar si pierde, como si se muriese en el campo de juego.
Prueba de esto es que casi siempre son los vencedores. Los equipos argentinos son los máximos ganadores de Copa Libertadores, con 22 títulos. Lo siguen los brasileños, con 13. Y en los últimos 10 años la han ganado 5 veces, repartiéndose la otra mitad un conjunto paraguayo, un ecuatoriano, un colombiano y dos brasileños. Además, cuatro de las siete Copas Sudamericanas las ganaron clubes argentinos.
Otro de los hechos, por el carisma y el ambiente, es el máximo derby del fútbol argentino: ha sido catalogado como el mejor de los diez espectáculos deportivos el Boca-River, qué más queda por decir? Sin dudas, la liga Argentina es la mejor de latinoamérica y de no ser por el escaso poder adquisitivo, sería la mejor del mundo, porque el mejor fútbol está en Sudamérica, por eso importan tanto de allí los equipos europeos.
FUENTE
...gracias por la info sergio.
...cada vez mas grandes loco!...gracias por la info